DROGANDO AL EJÉRCITO: SACANDO PROVECHO DEL TEPT
Dentro o fuera del campo de batalla, los hombres y mujeres tensos y fatigados quienes han servido, o están sirviendo en el ejército hoy en día, a menudo se enfrentan a secuelas emocionales. Esto ha sido un problema común a lo largo de los siglos, donde los soldados han sufrido de diferentes aflicciones como ansiedad, insomnio, pesadillas, estrés y depresión. Pero hoy en día, más que nunca, estas reacciones normales a las dificultades físicas y emocionales de la guerra están etiquetadas como un “trastorno mental” llamado “trastorno por estrés postraumático” (TEPT).
No hace mucho, los traumas causados por la guerra eran tratados con misericordia, entendimiento y amor. Pero hoy en día, la disposición a empatizar con el guerrero y escuchar sus experiencias ha sido remplazada por una mentalidad psiquiátrica de toma-una-píldora como solución rápida que emplea antidepresivos, antipsicóticos, estimulantes, sedantes o ansiolíticos.
Sin embargo, estos componentes químicos pueden causar consecuencias nocivas, y la acumulación de evidencia muestra que el uso cada vez mayor de drogas psiquiátricas puede estar provocando una epidemia de suicidios en el ejército y muertes sin explicación.
Desde 2001 hasta 2009, el índice de suicidio en el ejército aumentó más de un 150% mientras que las prescripciones de drogas psiquiátricas aumentaron un 76% durante el mismo período. Estas altísimas estadísticas no se pueden atribuir a los horrores de la guerra, ya que el 85% de las victimas de suicidio en el ejército nunca habían entrado en combate. Esto sugiere que el diagnóstico de TEPT está siendo distribuido ampliamente a soldados en servicio activo y a veteranos para justificar que se les de, a más y más de ellos, cócteles de drogas prescritas que alteran la mente y de las cuales puede que nunca se recuperen.
El documental, El Enemigo Oculto: Dentro del Plan Encubierto de la Psiquiatría, ha sido producido como un servicio público para soldados en servicio activo, veteranos y sus familias. Proporciona a los espectadores información que la industria farmacéutica-psiquiátrica no divulgará. Se publica aquí, no sólo para nuestros soldados, sino también para los gobiernos y oficiales del ejército que intentan entender cómo miles de millones de dólares en fondos destinados a la salud mental han fracasado tanto en ayudar a nuestras tropas.